Un padre ha sido acusado en Polonia de doble incesto y de matar a los bebés que fueron resultado de estas violaciones. Varios medios polacos han informado de que el hombre, Piotr Gierasik, de 54 años de edad, convivía con una de sus hijas, Paulina Gierasik, esta de 20 años, como si fuera su esposa.
El suceso ha tenido lugar en la localidad de Czerniki, en el norte de Polonia, y tanto padre como hija han sido detenidos. Según explica el diario polaco ‘Gazeta Wyborcza’, dos de los bebés serían hijos de Paulina y su padre, estando ella también involucrada en el asesinato, mientras que el tercero sería de la hermana mayor de esta, también violada por Piotr.
Los hechos han salido a la luz porque, según cuenta el periódico polaco ‘Fakt’, en la pastelería donde trabajaba Paulina sospecharon que estaba embarazada. Un dependiente del establecimiento ha contado que, aunque intentaba disimularlo, estuvo un tiempo acudiendo a trabajar con ropa holgada y se le notaba su estado. Sin embargo, después de las vacaciones regresó bastante más delgada y, cuando le preguntaron por el bebé, ella negó haber estado embarazada. En la confitería no se creyeron a la chica y decidieron denunciar.
El pasado viernes varios coches de la Policía aparecieron en la casa de la familia Gierasik para llevar a cabo un registro. Entonces hallaron tres cuerpos sin vida en el sótano de la casa que pertenecían a unos recién nacidos y salió toda la verdad a la luz.
La mujer de Piotr murió hace 15 años y él se quedó a cargo de 12 hijos (cuatro niñas y ocho niños), de los cuales muchos de ellos huyeron. El padre violó en numerosas ocasiones a dos de sus hijas: Paulina y Natalia, a las cuales dejó embarazadas y posteriormente mató a sus hijos.
En la pastelería donde trabajaba Paulina han declarado que la hija idolatraba a Piotr y que él la trataba como si fuera su esposa. Hace poco tiempo, dicen, le cortó el pelo para evitar que otros hombres se fijaran en ella. «Su padre influyó en ella psicológicamente desde una edad temprana», ha señalado una dependienta de la confitería.
Según el periódico local ‘Super Express’, los investigadores han determinado que Paulina estaba en una relación con su padre de forma voluntaria y la han imputado por tres delitos: dos por asesinato y otro por incesto. En el caso de Piotr, ha sido acusado de cinco cargos: tres por infanticidio y dos por incesto. Ahora el padre y la hija se enfrentan a cadena perpetua.