Preocupante panorama de hurtos y atracos en tres de las capitales más importantes del país.
El miedo ronda la Comuna 11 de Cali. Hay alerta en 23 barrios por los numerosos robos a personas, viviendas y vehículos.
Comerciantes de comidas rápidas del centro de la ciudad denuncian que han sido víctimas constantes de los atracadores frente a sus clientes.
La policía mantiene operativos para reducir el índice de robos, pero aún así se siguen presentando. Nadie se salva. Estudiantes, motociclistas, trabajadores y mujeres que salen de sus lugares de trabajo.
En Medellín los raponazos y atracos con armas blancas son el pan de cada día.
Los delincuentes operan sobre todo en los semáforos en conjunto con otros cómplices para «sitiar» prácticamente a sus víctimas. En poco segundos atacan con gran velocidad a los conductores y pasajeros de vehículos partículares o públicos para quitarles sus pertenencias.
La Comuna 10 La Candelaria, en el centro de Médellín, concentra el mayor reporte de robos de esta índole.
Los parques Bolívar, el de Botero, el de la Luz y sector San Antonio, tan visitados por los turistas, se han convertido en foco de atracadores que actúan incluso a plena luz del día bajo la modalidad del «cosquilleo».
De acuerdo con las autoridades el robo de celulares es de los delitos más preocupantes que se registra en la capital antioqueña.
Barranquilla no escapa a este flagelo. El fenómeno que más impresiona es el atraco a mujeres, quienes en repetidas ocasiones se transan en una corta batalla contra los delincuentes para no dejarse quitar sus carteras. El norte centro histórico es uno de los sectores más vulnerables a estos robos.
Los videos de seguridad muestran a diario lo que ocurre en las calles de la ciudad. Algunos escapan de los asaltantes exponiendo sus vidas porque la reacción de los ladrones podría ser la más violenta.
El fleteo sigue siendo el dolor de cabeza de las autoridades que protegen el sector financiero de esta capital.
Como Medellín en Barranquilla también el hurto de celulares sigue siendo una de las cifras más preocupantes de la inseguridad que se registra en La Arenosa.
El grupo antiatracos de la Sijin le hace frente a esta problemática.
En el año 886 personas han sido capturadas por hurto. Sin embargo el 60% de estas queda libre.
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