El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha designado este martes dos carteras cruciales para el país (Educación y Medicare) y los elegidos vuelven a ser polémicos siguiendo ya la misma línea que con los anteriores.
El magnate ha reubicado a la copresidenta de su equipo de transición para la nueva Presidencia, antigua administradora de la Administración de Pequeñas Empresas y exjefa de Pressing Catch (WWE), Linda McMahon, como secretaria de Educación.
Trump ha destacado de ella su «experiencia en liderazgo y su profundo conocimiento tanto de la educación como de los negocios, para empoderar a la próxima generación de estudiantes y trabajadores estadounidenses».
Asimismo, ha recordado que McMahon es una «firme defensora de los derechos de los padres» y que ha trabajado «duro» para «lograr la elección escolar universal en doce estados» del país, en los últimos cuatro años en los que ha estado al frente del Instituto de Políticas ‘America First’.
En cuanto a la gestión sanitaria, ha nominado al doctor Oz, un médico televisivo y promotor de la pseudociencia, como administrador de los centros de servicios sanitarios como Medicare o Medicaid. Trabajará «en estrecha colaboración» con Robert F. Kennedy Jr., elegido como secretario al frente del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS).
Oz, cirujano cardiotorácico, se postuló sin éxito para el Senado en 2022 en Pensilvania, con el apoyo de Trump, pero perdió ante el actual senador demócrata, John Fetterman. En 2018, Trump le nombró para el Consejo Presidencial de Deportes, Aptitud Física y Nutrición, cargo que volvió a ocupar en 2020. Oz saltó a la fama como invitado frecuente de Oprah Winfrey y lanzó su propio programa de entrevistas (‘The Dr. Oz Show’) en televisión en 2009, con el que se convirtió en uno de los médicos más conocidos del país y le granjeó varios premios Emmy.
Sin embargo, sus opiniones sobre el COVID-19 provocaron controversia. De hecho, a principio de la pandemia, promovió el fármaco hidroxicloroquina como forma de tratar el coronavirus pese a la falta de evidencia científica sólida de que fuera un tratamiento eficaz, opinión elogiada por algunos de los republicanos. Oz ha sido criticado por la comunidad médica durante años, informa CNN.