Francia ha elevado su nivel de alerta antiterrorista ante eventuales ataques de islamistas radicales que respondieron a la llamada del ‘viernes de la ira’ desde Palestina. Uno de los mayores temores es que actúen lobos solitarios, como hizo Mohammed Mogouchkov este viernes en un instituto de Arras, al norte del país.
El caso de este atacante, de origen ruso-checheno, es uno de los ejemplos de cómo el sistema falló. Según han publicado varios medios galos, como ‘Le Figaro’, Mogouchkov ya había mostrado signos evidentes de radicalización desde hace tiempo, hasta el punto de que este mismo verano había entrado en el programa de vigilancia. Incluso llegó a ser interceptado en alguna ocasión por parte de la policía.
Esta vigilancia no fue suficiente, ya que no supieron o pudieron frenar el ataque que realizó en el instituto Gambetta, donde asesinó a un profesor e hirió a otras dos personas al grito de «Alá es grande».
Un estudiante ‘promedio’, pero con familia radicalizada
Mogouchkov no llamaba la atención, a priori. Nacido en la región de Ingushetia, muy cerca de Chechenia (Rusia) en 2003, llegó a Francia con su familia en 2008. En Arrás se inscribió en el instituto donde cometió el asalto y desde 2021 estaba matriculado en una formación profesional de mecánica, según explica en su perfil de Linkedin. Su expediente educativo le señalaba como un estudiante promedio, sin destacar ni para bien ni para mal.
Sin embargo, en su vida personal sí había motivos de preocupación. Una revisión de sus redes sociales apuntaba a que estaba muy interesado en asuntos del conflicto árabe-israelí, información sobre el ataque a Charlie Hebdo y leía mucho sobre periodistas especializados en la yihad o guerra santa.
Pero, además, estaba muy influido por su entorno. Uno de sus cuatro hermanos, Mosvar Mogouchkov, fue detenido en 2019 por participar en un plan para atacar el Elíseo, y en abril de este 2023 fue condenado a cinco años de prisión. Este hermano tenía cierta relevancia en los círculos extremistas de la región, con discursos en los que hacía apología del terrorismo islamista y jutificando ataques como el citado contra Charlie Hebdo porque habían «insultado al Islam».
Mosvar Mogouchkov, hermano mayor de Mohammed, fue condenado a cinco años de cárcel por planificar un ataque contra el Elíseo
La ascendencia de Mosvar afectó no solo a Mohammed, sino también a otro hermano de la familia, de 17 años, que después del ataque de este viernes fue puesto bajo custodia policial.
La orden de expulsión fallida
La grieta en el sistema que ha permitido que los Mogouchkov siguieran en Francia se sitúa en 2014. En febrero de ese año se cumplió el tiempo máximo de permanencia en el país, y la policía llegó a llevales a un aeropuerto para devolverles a Moscú.
Sin embargo, las presiones de diversas asociaciones evitaron dicha deportación. Los Mogouchkov quedaron en una situación de vacío legal que les permitió regresar a casa con relativa normalidad, si bien el padre sí fue devuelto a Rusia en 2018… pera regresar a Francia un año después.
Ayudados por las mismas asociaciones que habían frenado su deportación, la familia comenzó a trabajar para pedir asilo político en Francia, que fue rechazada en marzo de 2021 inicialmente y sobre la que recurrieron a la Corte Nacional en agosto de 2022. Estaba pendiente de sentencia.
En cualquier caso, a Mohammed no le hubiera afectado, ya que está bajo protección al haber entrado en Francia siendo menor de 13 años. Emmanuel Macron propuso la reforma de esta ley para eliminar esta norma precisamente para evitar que menores de familias ya radicalizadas se asentaran como ciudadanos franceses, pero no pudo sacarla adelante por falta de apoyo parlamentario.