Los conflictos en Ucrania y Oriente Medio han minando las reservas de defensas aéreas de Estados Unidos, ha dicho este martes el principal almirante que supervisa las fuerzas del país en la región de Asia y el Pacífico.
La afirmación de Samuel Paparo habría podido llamar la atención de los miembros de la Administración entrante del presidente electo Donald Trump, que son más escépticos sobre la guerra en Ucrania y que sostienen que el presidente Joe Biden no se ha preparado para un posible conflicto con China.
Paparo ha dicho que el gasto en defensas aéreas estadounidenses «impone costos a la preparación» de Estados Unidos para responder en Asia y el Pacífico, particularmente dado que China es el adversario más capaz del mundo.
La Administración de Biden ha estado apoyando a Ucrania e Israel con sus defensas aéreas más sofisticadas. La Armada de Estados Unidos ha estado defendiendo directamente los barcos en el Mar Rojo frente a los ataques con misiles y drones de los rebeldes hutíes en Yemen.
En el caso de Ucrania, Biden ha proporcionado a Kiev una gama completa de defensas, incluidos misiles Patriot y sistemas nacionales avanzados de misiles tierra-aire.
«Con algunos de los Patriots y de los misiles aire-aire que se han empleado, ahora se están consumiendo las reservas y decir lo contrario sería deshonesto», ha dicho Paparo, jefe del Comando Indo-Pacífico de Estados Unidos, durante un evento.
El mes pasado, Estados Unidos había desplegado en Israel un THAAD, o sistema de defensa de área de gran altitud terminal, y alrededor de 100 tropas estadounidenses para operarlo. El THAAD es una parte fundamental de los sistemas de defensa aérea en capas del ejército estadounidense.