El canciller alemán, Olaf Scholz, no despierta demasiadas simpatías entre el resto de jefes de gobierno de la UE. Sin embargo su relación con el primer ministro británico, Keir Starmer, es amistosa y fluida. Los une un mismo estilo político, alejado del carisma, y un paso lento con luces largas. Esa conexión ha facilitado que la primera vista de Starmer a Berlín tras su reciente victoria electoral haya dado ya un primer y concreto fruto: ambos han anunciado el inicio de los trabajos diplomáticos para la firma de un tratado bilateral que profundice las relaciones que ambos califican de amistosas y marcadas por la confianza mutua. «Alemania y el Reino Unido están ligados por una amistad firme y por valores e intereses comunes. Somos socios en Europa y en la OTAN y, en vista de los retos ante los que se encuentran nuestros dos países, creemos que es tiempo de elevar nuestras relaciones a otro nivel», dice una declaración conjunta firmada por los dos mandatarios en la capital alemana. En la comparecencia posterior a su entrevista, Scholz señaló que será el primer tratado de ese tipo entre Alemania y el Reino Unido.El objetivo del viaje de Starmer a Berlín y a París es comenzar a recomponer las relaciones con los países europeos tras el Brexit . El canciller alemán se ha felicitado por «la mano tendida» y ha recordado que «la decisión histórica de salir de la UE fue tomada por los británicos y no se trata de revocar el Brexit, pero sí de lograr las mejores relaciones posibles para beneficio de las dos partes». Starmer, por su parte, subrayó que Alemania es el segundo socio comercial de Reino Unido y que con una intensificación de la cooperación se pueden crear puestos de trabajo en ambos países. Ha dicho además que esperaba que el tratado bilateral pueda estar listo a finales de este año para comenzar cuanto antes a recuperar las relaciones perdidas.Fortalecer el pilar europeo de la OTANEn el tratado se fijan cuestiones bilaterales, pero también puede ser un comienzo para la mejora de relaciones con la UE, según el ‘premier’ británico, aunque el establecimiento de relaciones más estrechas con París y Berlín, manteniendo al margen al resto de los socios, bien puede ser interpretado como un golpe al proyecto de la UE. Los temas que abordará el tratado serán, entre otros, la cooperación en política exterior, la transformación industrial y la cooperación en la lucha contra la migración irregular. «Juntos queremos fortalecer el pilar europeo de la OTAN», dijo Scholz. Con respecto a la lucha contra la migración irregular Starmer ha precisado que la clave será la cooperación para desmantelar las bandas de tráfico de personas.Los dos políticos, que pertenecen a la misma familia de partidos europeos, ya se habían reunido en la cumbre de la OTAN en Washington y en la cumbre europea en el sur de Inglaterra después de que Starmer asumiera el cargo el 5 de julio. El premier británico visitará también a los jefes del grupo de tecnología energética Siemens Energy y la empresa armamentística Rheinmetall durante su visita a Alemania, lo que habla de un ámbito de colaboración, el de la Defensa, que no aparece citado en la declaración conjunta. A continuación, viajará a Francia.
