La capital del Magdalena ha transitado por varios proyectos que hasta ahora no ofrecen solución a la principal problemática de los samios.
La construcción de una planta desalinizadora de agua vuelve a emerger como solución al desabastecimiento del líquido vital en Santa Marta, luego que el presidente Gustavo Petro Urrego propusiera al Emir de Qatar, jeque Tamin Bin Hamad Al Thani, iniciar estudios para determinar la viabilidad de un proyecto de este tipo.
El tema lo trataron en el encuentro que sostuvieron este miércoles en Bogotá durante la visita de Estado que el representante del gobierno catarí cumple en Colombia.
“Propuse iniciar estudios para una posible gran desalinizadora para agua potable en Santa Marta y de convertir su puerto en el puerto del hidrógeno verde de Colombia” dijo Petro Urrego a través de su cuenta en X.
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La falta de agua potable es el mayor problema que se ciñe sobre Santa Marta, que lleva más de 5 décadas buscando una solución definitiva al desabastecimiento que afecta a esta ciudad y que se agudiza durante los meses de intenso verano, momento en que conseguir el preciado líquido se convierte en toda una odisea para miles de familias en esta ciudad.
Entre dichas soluciones ya se había contemplado la posibilidad de una planta desalinizadora que tomara agua del mar para hacerla apta al consumo humano.
En marzo del año 2019, el entonces alcalde de Santa Marta, Rafael Martínez, junto a quien en ese momento fungía como gerente de la Empresa de Servicios Públicos de Santa Marta, Ingrid Aguirre viajaron a Israel como parte de la misión organizada por el Ministerio de Vivienda de Colombia, cuyo titular de la época, Jonatán Malagón, logró el apoyo de la Embajada de ese país en Colombia, el Ministerio de Comercio e Industria del Estado de Israel y la Cámara de Comercio Colombo-israelí para conocer el funcionamiento de las desalinizadoras con las que se surten las necesidades de agua .
En esa oportunidad, el burgomaestre samario sostuvo que el recorrido por el territorio israelí serviría para que su gobierno tome una decisión final sobre la posibilidad de instalar en la capital magdalenense una planta desalinizadora de agua con el fin de asegurar el suministro del recurso hídrico durante los próximos 20 o 30 años y satisfacer las necesidades de su población permanente y flotante.
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Para esto, aseguró que su gobierno disponía de 400 mil millones de pesos para invertir en la instalación y puesta en funcionamiento de una planta desalinizadora que abastecería a la ciudad de aproximadamente 1.500 litros de agua por segundo.
No obstante, el proyecto no avanzó por presunta inviabilidad en la relación costo beneficio que representaría dicha inversión.
Ahora, con la propuesta del presidente Petro al gobierno de Qatar surge una nueva esperanza de solución a la falta de agua en Santa Marta, ciudad que por distintas circunstancias no ha logrado materializar una cantidad de proyectos expuestos para poner fin al padecimiento de los samarios.
Es preciso recordar que el Plan de Desarrollo del alcalde Carlos Pinedo propone estrategias para mejorar la calidad y disponibilidad del agua, como la construcción de la línea de conducción de agua potable desde la PTAP El Curval hasta su incorporación a la red matriz en Mamatoco, contenida en el Plan Maestro de Acueducto y Alcantarillado.