El robo, al parecer, tuvo lugar mientras los visitantes estaban a bordo de un recorrido por las islas del Rosario.
Un desagradable incidente empañó las vacaciones de una familia en las Islas del Rosario. Juana, una turista, denunció a través de redes sociales el robo de 2.500 dólares de la tarjeta de débito de su cuñado, mientras disfrutaban de un recorrido en bote por el archipiélago.
“Alquilamos un bote con una agencia. La agencia, todo bien; pagamos la mitad por anticipado y la otra mitad el día del paseo. El bote llegó a tiempo y salimos hacia las Islas del Rosario. Una vez allí, sacamos todas nuestras pertenencias del bote por precaución”, se lee en la publicación.
Según el relato de la joven, la familia alquiló un bote con una agencia de turismo y durante el paseo, el novio de su hermana dejó su billetera en un área del bote donde se guardaban las bebidas.
“Pero el novio de mi hermana había dejado su billetera en las bolsas donde llevábamos las pacas de agua que habíamos llevado al bote. Muy amablemente le habíamos dicho al encargado del bote y a su asistente que podían tomar con confianza si querían agua o cervecita”.
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Posteriormente, se percataron de que habían sido realizadas transacciones no autorizadas en su tarjeta, a pesar de que esta se encontraba en la billetera.
“Minutos después estábamos todos en la playa, el capitán nos hace 5 llamadas para saber dónde estábamos y a los 10 minutos al novio de mi hermana le llegan 2 débitos a su tarjeta, lo primero que hizo fue llamar al banco e ir a buscar su tarjeta la cual estaba intacta donde la dejó”.
El banco confirmó que los pagos se habían efectuado mediante un dispositivo portátil de pago, conocido como ‘Bold’. Sin embargo, a pesar de utilizar este dispositivo, la tarjeta física fue encontrada en la billetera. La familia, al percatarse del fraude, solicitó regresar a Cartagena y denunció el hecho a la Policía de Turismo.
Sin embargo, al momento de volver a la ciudad, las indagaciones se vieron obstaculizadas debido a que el asistente del bote era menor de edad, lo que limitó las acciones legales que se pudieron tomar.